Es increíble que todas las palabras inicien con tu nombre:
Amor,
amigo,
ángel,
tormento.
Amor,
amigo,
ángel,
tormento.
Cariño que nunca estás,
Cariño que nunca fuiste.
Detrás de las ventanas sin cristales, de esta mi casa nueva,
veo pasar muchos e inevitables días sin ti, siempre sin ti.
Cariño que nunca fuiste.
Detrás de las ventanas sin cristales, de esta mi casa nueva,
veo pasar muchos e inevitables días sin ti, siempre sin ti.
Ayer soñé contigo.
Con tu fina figura impenetrable que nunca tuve, ni tendré.
Soñé con tus manos delgadas, con tus labios.
Con tu fina figura impenetrable que nunca tuve, ni tendré.
Soñé con tus manos delgadas, con tus labios.
No puedo despedirme de ti.
Nunca he podido.
Nunca he podido.
No pereces jamás en mis recuerdos.
No pereces jamás, como tu orgullo y como el mío.
Y como el orgullo humano permaneces.
No pereces jamás, como tu orgullo y como el mío.
Y como el orgullo humano permaneces.
Siempre tú.
Tú desdén.
Tu mirada.
Tu eterno silencio,
ese ego perpetuo que no cambia.
Tú desdén.
Tu mirada.
Tu eterno silencio,
ese ego perpetuo que no cambia.
Tú, tan tú.
Yo, tan yo.
Nuestros caminos tan poco coincidentes en el tiempo.
Esas variables concretas que no cambian,
que no alteran el transcurso de la emoción detrás de tu misterio.
Yo, tan yo.
Nuestros caminos tan poco coincidentes en el tiempo.
Esas variables concretas que no cambian,
que no alteran el transcurso de la emoción detrás de tu misterio.
Es increíble que todas las palabras inicien con tu nombre:
Adiós,
alba,
atardecer y sueño.
Adiós,
alba,
atardecer y sueño.
Dices que no sabías. Dudo de ti.
Tenías que saberlo…haberlo sabido desde siempre.
¡Que te amé, que te quise…que quizá aún te quiero!
¡Que eres mi estigma interminable, mi lágrima perene!
La sonrisa que finjo diariamente,
la pesadilla interminable que me estremece el cuerpo cuando duermo.
Tenías que saberlo…haberlo sabido desde siempre.
¡Que te amé, que te quise…que quizá aún te quiero!
¡Que eres mi estigma interminable, mi lágrima perene!
La sonrisa que finjo diariamente,
la pesadilla interminable que me estremece el cuerpo cuando duermo.
No, no quisiste saber.
No te importó saberlo.
No importa.
En mis recuerdos serás el mismo hombre de hoy y el de mañana,
El mismo de siempre, sin esa dualidad obscura que no entiendo.
No te importó saberlo.
No importa.
En mis recuerdos serás el mismo hombre de hoy y el de mañana,
El mismo de siempre, sin esa dualidad obscura que no entiendo.
Amor, amor, amor…..locura de mis juveniles 16.
Es increíble que todas las palabras conocidas de mi vocabulario de mujer
inicien con tu nombre.
Es increíble que todas las palabras conocidas de mi vocabulario de mujer
inicien con tu nombre.
María Isabel (Poeta mexicana. Médico de Profesión)
compañera participante del Blog global "Poemas del Alma".
compañera participante del Blog global "Poemas del Alma".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Valoraré en sumo grado su inteligente como generosa referencia a este blog.