domingo, 23 de octubre de 2016

OTRO POEMA COMPARTIDO

                 SUEÑOS

!Ah, déjame que cante
para ti esa canción vaga y remota!
Yo nací con un verso clavado en mi costado,
por cuya herida mana mi sangre enfebrecida.
No tengo más que esta tristeza lírica
y esta pasión de ser... Desalentada,
soy como corza huyendo de la vida.
Serás tú el cazador que me derribe
mal herida, en los campos del deseo?
Será tu mocedad la que traduzca
la inquietud de mi carne enamorada?
!Qué sola estoy sin ti! Sola y perdida
como un arcángel triste, desterrado,
que al pie de los celestes torreones
evoca su perdida aristocracia.
Por qué vacilo aún si estoy muriendo
por apagar mi sed en tu corriente?
Mi timidez me ciñe a la tortura
de soñarte hasta el éxtasis, y a veces
-!tanto te habré besado!- que despierto
con un sabor de estrellas en los labios.

                                 Susana March

domingo, 16 de octubre de 2016

UN NUEVO POEMA MÍO PARA USTEDES

                    COMO NADIE

Allí estaba cada tanto con su gracia
embriagando mis sentidos, sin dejarme respirar.

Y allí yo leyéndole quizá pocos-muchos versos
al ritmo de mi sangre y al compás del corazón.

No había reparado que su risa era un concierto
que su gesto y alegría eran ópera y canción.

No sabía que sus ojos eran gemas, eran sol
y que eran subyugantes los colores de su luz.

Y lo he visto en su rostro fuente clara, tilo en flor
y en su pelo y en su boca fresca aurora y viento azul.

Allí estaba transformando los motivos de mi ser
y yo esa ola-fuego pretendiéndolo ocultar.

Yo no he visto, yo no veo tanta gracia, tanta paz
yo no tuve otro encanto como ese, ayer, hoy...

Y es ella en la noche sueño tibio, mi solaz
y es ella en todo tiempo mi promesa, sino y paz.

Yo ansío, anhelo, quiero esa deidad alcanzar
y llevármela conmigo por el cielo, tierra y mar.

                                      Bolívar Delgado Arce

(Inédito)

domingo, 9 de octubre de 2016

COMPARTIENDO UNA POESÍA DE JOSÉ ÁNGEL BUESA

        POEMA DE LA DESPEDIDA

Te digo adiós, y acaso te quiero todavía,
quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
o tal vez nos quisimos demasiado los dos.

Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... No sé si te amé poco,
pero sí sé que nunca volveré a amar así.

Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás amé.

Te digo adiós, y acaso con esta despedida
mi más hermoso sueño muere dentro de mi...
Pero te digo adiós para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.

lunes, 3 de octubre de 2016

COMPARTIENDO UNA HERMOSA POESÍA ECUATORIANA

         EL ALMA EN LOS LABIOS

Cuando de nuestro amor la llama apasionada
dentro tu pecho amante contemples extinguida,
ya que solo por ti la vida me es amada,
el día en que me faltes, me arrancaré la vida.

Porque mi pensamiento, lleno de este cariño,
que una hora feliz me hiciera esclavo tuyo,
lejos de tus pupilas es triste como un niño
que se duerme, soñando en tu acento de arrullo.

Para envolverte en besos quisiera ser el viento
y quisiera ser todo lo que tu mano toca;
ser tu sonrisa, ser hasta tu último aliento
para poder estar más cerca de tu boca.

Vivo de tu palabra y eternamente espero
llamarte mía como quien espera un tesoro.
Lejos de ti comprendo lo mucho que te quiero
y, besando tus cartas, ingenuamente lloro.

Perdona que no tenga palabras con que pueda
decirte la inefable pasión que me devora;
para expresar mi amor solamente me queda
rasgarme el pecho, Amada, y en tu mano de seda,
!dejar mi palpitante corazón que te adora!
                                  
                                      Medardo Ángel Silva